viernes, 29 de julio de 2016

DANDO GRACIAS DE PIERNAS ABIERTAS Y POR PARTIDA DOBLE.



Luego de seis meses en donde la religiosa constancia y la amplia experiencia de Steve Daniels saturaron mis dìas y mis noches de sexo duro e intenso llevandome hasta el borde de la locura; todo parecia encajar a la perfeccion. Desde la segunda semana que comenzamos a tener intimidad, abrio una cuenta para mì y depositaba en ella una cuantiosa suma para que me diera gusto con cualquier capricho propio de mi edad. Por supuesto yo retiraba todo de la cuenta en cuanto ingresaba y lo guardaba en una caja de seguridad ubicada en mi cuarto la cual mi padre me regalo. Una pequeña parte de ese dinero sirvio para ampliar mi ajuar de ropa interior y pijamas. Me decidi entre una gama de sexy y coqueta a sucia e impudica y aun no tenia muy claro cual de los dos estilos lo trastornaba màs.

Durante la cena de Accion de Gracias que mis padres ofrecieron; la casa se abarroto de vecinos y amigos…uno de ellos me tomo por sorpresa. Samuel se acercò a mi con ese dulce brillo en sus ojos y me beso tiernamente en la mejilla; escoltado por su hermana Silvia y sus padres. Era la primera vez que nos veiamos desde nuestro ùltimo y fogoso encuentro. Me llevo a parte mientras su familia saludaba a la mìa y nos acomodamos en una mesa frente a la enorme ventana que daba al jardin. Me entrego una pequeña cajita que contenìa una pulsera de plata con sus iniciales y las mias grabadas, como regalo de cumpleaños y le agradecì con un beso en la mejilla. Por reflejo vi a Steve observàndonos muy molesto desde el jardìn; màs no era mucho lo que podia hacer al respecto en ese momento. Samuel me reclamo aunque con mucha dulzura por la escasa comunicación entre los dos durante ese tiempo. Yo no respondìa a muchas de sus llamadas, sus correos y mensajes de texto y la verdad era que pretendìa que se enfocara en su carrera y consiguiera una novia universitaria, pero el no pensaba en otra cosa que en mi. Ser el primer hombre que me dio tanto placer lo habia marcado màs de lo que presumìa y considerando que se suponìa que yo lo amaba y que esa fue la pincipal razon de mi entrega; mi actitud fria y distante lo habìa desconcertado.

Aunque ya era costumbre que acampara en el patio trasero de la casa la  noche de Accion de Gracias con mi padre; Samuel me obligò a comprometerme a verlo. Al rato Steve se me acercò en la cocina y me cuestiono sobre que tanto hablaba con Samuel. Sus celos lo implulsaron a perder la discrecion y actuar agresivo y dominate conmigo, accion que casi nos descubre cuando mi abuelo entro a la cocina en busca de una soda. Afortunadamente Steve actuo con rapidez y me soltò; pero con voz baja me exigio que lo viera mas tarde a solas aunque no le prometì nada. 

Pasada la media noche Samuel se aparecio en el patio trasero de mi casa. Abandone la carpa usando solo mi pijama y verifique que la pildora para dormir que le di a mi padre hubiera surtido efecto. Acto seguido escolte a Samuel hasta su jeep y condujo hasta un parque cercano. Se suponìa que hablariamos pero en cuanto me beso, senti a su polla ponerse dura y abri las piernas casi por instinto. Entro en mi coño con tanta fuerza que emitì un gemido incluso mas alto que la primera vez que lo hizo. Rodamos sobre el pasto y con mis piernas sobre sus hombros recibi su embestida gustosa. La situacion era apremiante. Samuel se estaba tirando a una menor de edad al aire libre en una zona en donde podìa ser visto; sin embargo lo ùnico que parecia preocuparle era si yo lo disfrutaba ya que entre jadeos me preguntaba.
              
               ¿Me extrañaste? ¿Te gusta? ¿Te la meto toda?
                Si, si, si. Yo le respondia a todo.

Me puso en cuatro y comenzo a penetrarme por detràs, empujando su polla bien profundo y meciendo sus caderas como una maraca. Gritaba con todas mis fuerzas. En mis faenas con Steve parecia haber olvidado la delicia que era que Samuel me follara; pero despues de esa noche no lo olvidarìa nunca màs. Samuel retirò su polla un momento y mientras su manos apretaban mis endurecidos pezones, su lengua invadia mi coño haciendo circulos, luego sus dedos juguetearon con mi clìtoris y su lengua ahora se adentraba en mi culo. Mi vagina estaba empapada, un hilo de jugo abandonaba mi coño y Samuel lo lamìa àvidamente y se saboreaba.

                ¡Uy que delicia! Decìa entre susurros, mientras su lengua entraba y salia de esos dos hoyitos que tanto lo excitaban.

De nuevo empujo su polla en mi coño y me entremecì, acompañe su movimiento y nos unimos en un vigoroso compàs que aumentò el placer para ambos. Saco su polla y la metiò en mi culo aunque debio empujar con mas fuerza para obligarla a entrar. Finalmente lo hizo y tomo posesion de algo que sabia que era suyo…que yo era suya y que siempre lo seria sin importar la existencia de otros hombres, del tiempo y de la distancia. Regreso a mi coño y repitio esa accion entre el y mi culo una y otra vez, aumentando la potencia de su penetraciòn. Las luces rojo y azul intenso de una patrulla se divisaron a varias cuadras. La patrulla se aparcò en un cruce pero a la distancia no se advertian sus ocupantes. Samuel apretò mis senos y comenzo a besar la parte posterior de mi cuello sin amainar la intensidad de su embestida. Minutos despues y aùn con la patrulla a nuestra vista Samuel se corrio dentro de mì y susurro a mi oido, tocando mi clìtoris y acariciando mis senos.

                ¡Que rica estas, vamos correte para mì!

Y un par de minutos despues con sus dedos en mi coño tambièn lo hice. La patrulla tomo una direccion contraria al parque y Samuel y yo comenzamos a reir a carcajadas. Un cuarto de hora despues y aùn con la adrenalina al màximo me posò sobre el capo del jeep, me abrio las piernas de un tiròn y comenzo a follarme ahora como si el mundo se fuera a acabar y haciendo que me corriera a mares esta vez sobre su polla.

Debo reconocer que esta vez cuando Samuel regreso a la universidad me entristecì. Me habia hecho gozar inmensamente en un sitio publico y comenzaba a advertir que no solo el sexo de reconciliacion era memorable; tambien lo era el de despedida y ahora que Samuel me habia hecho prometerle que hablariamos mas y no volveriamos a perder el contacto; comprendìa que librarme de èl no me resultarìa tan sencillo como vaticinè. A la mañana siguiente tomaba una larga y tibia ducha evocando la dura y caliente polla de Samuel penetrandome; cuando unas manos familiares tiraron de mi cabello con firmeza. Steve me empujo contra la pared de vidrio de la ducha y separo mis piernas con furia antes de embestir dentro de mi coño con vigor. Se me hacia obvio que debia estar muy molesto conmigo porque no lo busque la noche anterior; para atreverse a irrumpir en mi casa y en mi habitacion a plena luz del dìa arriesgandose a ser descubierto; porque si bien mis padres habìan salido, en la casa estaba el personal de servicio. 

Mientras me follaba con violencia puso su mano en mi boca impidiendome gritar; al tiempo que susurraba en mi oido…puta. Casi inadvertidamente me corri y ese hecho lo excitò aun màs.

                ¡Puta, puta, puta! Repetìa en mi oido como una sentencia. 

Con una de sus manos levanto mi pierna derecha para facilitar la intrusion de su polla y continuo presionandome contra el vidrio. Su determinacion era absoluta, nada lo detendrìa y aun cuando afuera de mi habitacion se escucharon los pasos de la mucama mientras realizaba el aseo; continuaba cabalgandome con todo su impetu. Finalmente cuando la furia, los celos y el deseo rindieron sus frutos; estallo dentro de mi colmando mi coño hasta su desborde.

Poco despues y casi sin aliento me dio un ultimatum. Dijo que no queria ver a ningun otro hombre cerca de mi. Que mas me valia atenderlo cuando me llamaba y que yo era suya y si me atrevìa a engañarlo lo matarìa a èl y a mì y fue bastante convincente. Por desgracia para èl yo no reacciono muy bien ante las amenazas y ya que Steve habia decidido convertirse en una molestia para mì; me habìa obligado a adelantar mi plan de salida. No obstante debia asegurar en mis manos la gruesa suma que èl me habia prometido y comenzar a trabajar en la consecucion de mi nuevo maestro. Uno que me enseñara no solo de otros placeres del sexo, sino que tambien ampliara mis conocimientos en el arte de la manipulacion…pieza clave para poder alcanzar el siguiente escalon de mi nutrida escalera.



1 comentario:

  1. Que zorra,muero de curiocidad por saber quien sera tu próxima víctima.

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